Con 25 imparables, incluidos tres jonrones, y destacada labor del lanzador Marco Carrillo fueron la clave de los Yaquis que ganaron la final 4-0, sumaron su sexto título y aseguraron su pase a la Serie del Caribe que ganaron el año pasado.
Con el rival presionado por la obligación de ganar cuatro consecutivos para no ser eliminados, los Yaquis explotaron en el primer acto con cinco que decidieron. Alfredo Amézaga sacó la pelota del cuadro para dar una ventaja de 1-0, ampliada con sencillo impulsor del cubano Bárbaro Cañizares y jonrón de tres carreras de Iker Franco.