101-126: Unos Lakers en cuadro y sin Gasol apabullan a los Brooklyn Nets

Los Ángeles (EE.UU.), 10 abr (EFE).- Sin LeBron James, Anthony Davis, Kyle Kuzma ni Marc Gasol, Los Angeles Lakers tiraron este sábado de orgullo para destrozar de forma sorprendente y rotunda a los Brooklyn Nets (101-126) de Kevin Durant y Kyrie Irving.

Además de las duraderas ausencias de sus estrellas James y Davis, los angelinos aterrizaron hoy en Nueva York con más malas noticias bajo el brazo.

Kyle Kuzma, con molestias en el gemelo, se perdió su segundo partido consecutivo, y Marc Gasol, cuyo peso en el equipo se ha visto reducido por el fichaje de Andre Drummond, tampoco jugó por molestias en los isquiotibiales de la pierna izquierda.

Con todo esto, la noche se presentaba negra para los de púrpura y oro, ya que visitaban la cancha del mejor equipo de la Conferencia Este.

Pero ni Kevin Durant ni Kyrie Irving, al mando de una plantilla repleta de recursos ofensivos, supieron frenar a unos magníficos Lakers con mucho corazón, sacrificio y acierto de cara al aro que llegaron a rozar ventajas humillantes de casi 30 puntos.

Drummond sumó 20 puntos (8 de 15 en tiros) y 11 rebotes en solo 22 minutos, pero hasta ocho jugadores de los visitantes sumaron más de diez puntos.

El base Dennis Schroder impartió una clase magistral en la primera mitad con 19 puntos, pero nada más comenzar el tercer cuarto fue expulsado junto a Kyrie Irving por una tibia discusión que los árbitros castigaron con asombrosa severidad.

Los Lakers disfrutaron de una puntería maravillosa durante toda la noche: anotaron 50 % en tiros de campo (47 de 93) y un 56 % en triples (13 de 20).

También se llevaron la batalla del rebote (55 por 47) y, en general, dieron la impresión de tener un punto más de energía que sus rivales en todos los lances del juego.

Los Lakers tienen ahora 33 victorias y 20 derrotas con las que siguen a la caza de la cuarta plaza del Oeste, ahora en manos de los Denver Nuggets (34-18).

Por parte de unos muy decepcionantes Nets, en los que James Harden sigue de baja, Durant fue el principal referente en ataque con 22 puntos, 7 rebotes y 5 asistencias.

Irving logró 18 puntos antes de su expulsión.

El conjunto dirigido por Steve Nash, que presentó un espantoso 18 % en tiros de tres (5 de 27), se mantiene al frente del Este (36-17).

APLASTANDO DESDE EL PRINCIPIO

Los actuales campeones de la NBA se lanzaron de cabeza a por el partido con un comienzo fantástico (7-18 tras cuatro minutos).

Tanto desde el perímetro como en la zona con Andre Drummond, los Lakers explotaron las pérdidas, dudas y titubeos de unos Nets que entraron al duelo con el pie izquierdo.

Dennis Schroder se hizo con el timón del partido, con solo Kyrie Irving eclipsando su exhibición, y dos robos y contraataques de Montrezl Harrell y Alex Caruso certificaron que el primer cuarto fue totalmente angelino (25-33).

El segundo parcial comenzó de manera muy prometedora para los Nets, con Durant e Irving asumiendo el peso del encuentro y con la única sequía ofensiva que afrontaron los Lakers en toda la velada.

Los neoyorquinos consiguieron incluso darle la vuelta al marcador y relajar el impulso de los Lakers, pero un triple de un excepcional Schroder mandó a los suyos al vestuario por delante (58-61).

Hasta ese momento, Schroder e Irving habían sido los mejores sobre la cancha en un gran duelo de bases.

Pero el espectáculo se fue al garete cuando, tras una discusión que por la televisión no parecía gran cosa, fueron expulsados en el inicio del tercer cuarto de forma difícilmente explicable.

Daba la impresión que los Lakers tenían mucho más que perder que los Nets, teniendo en cuenta su abultado informe de bajas.

Pero al final resultó todo lo contrario.

Kentavious Caldwell-Pope, inédito hasta entonces, capitaneó un enorme parcial de los Lakers (15-26) tras las expulsiones y abrió una diferencia ya muy importante al final del tercer cuarto (77-92).

Ante unos Nets muy confundidos, los Lakers, con una actuación muy sólida en todo momento, parecían tener muy claro a qué y cómo querían jugar.

Todo salía a pedir de boca para los de Frank Vogel.

Y el mejor ejemplo de ello fue Ben McLemore, que se incorporó a los Lakers esta semana, que solo había jugado un partido hasta ahora con los californianos, y que, en el arranque del último cuarto, se lució con tres triples consecutivos para catapultar a los suyos hacia diferencias escandalosas (83-105 tras tres minutos y medio).

A partir de ahí, el partido ya no tuvo más historia y los Lakers coquetearon con alcanzar los 30 puntos de ventaja.

Los Lakers permanecerán en Nueva York para medirse el lunes a los New York Knicks, mientras que los Nets se enfrentarán el mismo día a los Minnesota Timberwolves.

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