Popular en la cocina nacional de muchos países, la zanahoria es un alimento increíblemente versátil y rico en nutrientes. Esta raíz comestible tiene, sin embargo, un efecto positivo en nuestro organismo que muchos desconocen: puede ayudar a combatir el cáncer.
La zanahoria, así como otras verduras y frutas, puede ser considerada «una mina de oro de antioxidantes», destaca el portal Eatthis. Los antioxidantes son compuestos de origen vegetal, los cuales son capaces de neutralizar el efecto negativo de los radicales libres en nuestro cuerpo, como el daño celular, la inflamación y el cáncer.»
Con los altos niveles de antioxidantes de las zanahorias, un efecto impresionante de comer esta verdura es cosechar sus beneficios para combatir el cáncer», subraya el medio.
El efecto positivo de las zanahorias en la lucha contra el cáncer ha sido observado en numerosas investigaciones. Según los estudios, esta verdura puede desempeñar un papel en la prevención del cáncer gástrico, cáncer de colon, cáncer de próstata, leucemia y cáncer de pulmón.
Los científicos creen que la relación entre una mayor ingesta de zanahoria y una menor incidencia de cáncer puede atribuirse a la biodisponibilidad de dos carotenoides en este alimento: el α-caroteno y el β-caroteno. Estos pigmentos orgánicos son conocidos por su alta actividad antioxidante.
Las zanahorias son una de las mejores fuentes de carotenoides que se pueden incluir en la dieta. Sus niveles de α-caroteno y β-caroteno son superados solamente por los orejones de albaricoque, apunta Eatthis.
Pese a su efecto positivo, el simple hecho de comer zanahorias no es suficiente para evitar el cáncer. La enfermedad está asociada a diversos hábitos dañinos como el tabaquismo, el consumo de alcohol, la falta de actividad física y una dieta inadecuada. La genética y otras condiciones de salud como la obesidad y la diabetes también desempeñan un papel en el desarrollo del cáncer. Las zanahorias son solo una de las muchas formas de reducir el riesgo de que padezcas esta enfermedad mortal.