SANTO DOMINGO.- La intervención del puente Profesor Juan Bosch para el cambio de juntas del piso de rodamiento, que inician este viernes 28 a partir de las 9:00 de la noche, no tendrá mayores implicaciones en cuanto a congestionamiento del tránsito, siempre que los conductores se organicen y hagan uso de la Barcaza flotante y rutas alternas.
El ingeniero Onésimo González, asesor del Ministerio de Obras Públicas, adelantó que durante los trabajos siempre quedarán en funcionamiento cuatro carriles desde la zona este al Distrito Nacional, ya que solo bloquearán dos carriles por 15 días por 24 horas, los primeros de estos de este a oeste, hacia el puente de La 17.
Luego trabajarán los dos tramos centrales, por 15 días más y luego trabajarán con la colocación de las juntas del carril de contraflujo y el del puente normal con los que se completan los 45 días.
“En vez de utilizar los cinco carriles que usan regularmente se les va a agregar el carril de contraflujo para ponerlo en una dirección, desde Santo Domingo Oriental al Distrito Nacional”, precisó Onéximo González
Cada carril maneja mil vehículos por hora, que equivalen a un total de seis mil por horas cuando están todos en función. Quedarán cuatro en función, y para dar mayor accesibilidad en horario de 6 de la mañana a 9:00 a.m. estará en operación el puente de la Barcaza o flotante por la avenida Barceló, desde Santo Domingo Este al Distrito Nacional, con sus cuatro carriles.
Labor colateral
El experto vial adelantó que posterior a esa labor procederán a asfaltar la base de rodamiento para que haya un tráfico más fluido, revisarán y mejorarán la iluminación del puente y las señalización horizontal y vertical para que la infraestructura quede completamente remozada. Otras mejoras no requerirán el cierre del paso por el puente atirantado.
El deterioro que registra ese trayecto genera dificultades a los conductores al transitar por allí, perdida de tiempo e impacto a las unidades vehiculares por los saltos que tienen que dar.
El experto vial, Onéximo González insistió en el cambio de esas placas era necesario, ya que las mismas tienen una vida útil de 15 años y tenían que ser cambiadas hace ser cambiadas hace cinco años, ya que las misma funcionan como las vértebras en la columna vertebrar y de no hacerse, en un terremoto, Dios no lo quiera podría colapsar ya que la losa no podría estar de forma rígida.
Rutas
Tanto Onésimo González como Alexandra Cedeño, directora de Movilidad Sostenible del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (INTRANT), reiteraron que se han habilitado rutas alternas para que los conductores circulen sin dificultades mientras se realizan los trabajos.
Entre esas citaron la calle Miguel Barceló hasta el puente flotante, habilitada desde el parque de la avenida Venezuela que la va a alimentar, las calles Puerto Rico, Club de Leones y Club Rotario, en el ensanche Ozama, bajando en sentido este-oeste hasta la calle Juan Luis Duquela.
Movilidad
Onéximo González especificó que el puente tiene cinco mil vehículos por hora en dirección este-oeste ahora solo circularán cuatro mil, pero los conductores tendrán la facilidad de la Barcaza que acoge a unos cuatro mil más.