Washington sigue inmerso en el litigio del mar de China Meridional, donde a veces fuerza a meterse a varios países de la región. El gigante asiático, por su parte, mantiene una postura firme: su soberanía sobre las islas del área no es objeto de controversia. La injerencia de cualquier país que no tiene nada que ver con esta región solo va a complicar la situación, afirma el experto.
«Desde mi punto de vista, Pekín puede mantener la situación de paz y estabilidad en la región del mar de China Meridional junto con los países vecinos, además de aumentar la cooperación con los países de ASEAN», asevera Shishun.
Si China logra establecer la cooperación con los países vecinos al crear una atmósfera de mutua confianza, varias cuestiones podrán ser solucionadas a través del diálogo sin necesidad de emplear la fuerza militar. El único recurso necesario es el tiempo, puntualiza el analista.
Además, prosigue, se puede decir que la injerencia de Washington es en vano: los países vecinos de China «en realidad no quieren convertirse en lacayos de Estados Unidos». Shishun añadió que la postura política mantenida por el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, así como la reciente visita de las autoridades vietnamitas al gigante asiático solo confirma dicha postura.
En la actualidad, cada parte del conflicto toma medidas para mantener la estabilidad en la región. El experto opina que EEUU no solo no desea que prosiga esta situación, sino que quiere más bien agitar las cosas.
Pekín sigue sin tomar decisiones erróneas y no tiene miedo a que alguien pueda causarle problemas. China coopera con los vecinos, pero en caso de provocaciones puede tomar medidas duras en respuesta para salvaguardar su soberanía y el desarrollo de las islas. El gigante asiático también protegerá la seguridad de la navegación en la región, concluye el entrevistado.