No le echemos la culpa al Covid 19

Jesús Antonio Fernández

No se puede luchar solo contra el Virus Covid 19 sino también debemos combatir por así decirlo, luchar o hacer el vacío, la no participación en el sistema injusto en el que vivimos.

Las medidas no serán de eficacia real sino desmantelamos el sistema absurdo en el que vivimos hoy de forma cotidiana. Nada será posible nuevamente, no saldrá una sociedad nueva y renovada si no cambiamos las personas que habitamos en ella.

¿Alguien llegó a pensar que si se volvía a las Universidades, colegios, la actividad comercial el virus no se expandirá y habría nuevos contagios? No llegar a pensar esto es de una ceguera total.

Cuando es el gran capital el que lleva la brújula o la voz cantante en un sistema como el nuestro las decisiones políticas son llevadas de la mano y la gente trabajadora, común, humilde o en paro queda en segundo o tercer plano.

Para hacer creer que se está haciendo algo se anuncia una serie de medidas sin coherencia como es el toque de queda. Sólo están encaminadas a disciplinar a la población ante el caos que el sistema económico ha producido.

Gobernar a golpe de restricciones. Y también para ir poco a poco controlando a las poblaciones y así evitar desbordes masivos y altercados que se podrían producir debido a esta situación de asfixia que padece la gente en general.

Si realmente quisieran poner en marcha medidas efectivas para combatir el virus ya lo estarían haciendo, pero este tipo de decisiones no les gusta a la oligarquía económica. El silencio mediático que generan se traduce en cifras, datos, estadísticas y porcentajes que la mayoría entiende.

Si te movilizas a más recursos policiales que sanitarios tienes un determinado resultado. Este tipo de medidas por sentido común son las siguientes: Incremento de los recursos a hospitales, centros de salud, atención domiciliaria y residencias.

Mejorar ampliamente el transporte público para así evitar la masificación. En el plano educativo aumentar el número de profesores, clases e infraestructura. Parada de áreas productivas no esenciales como las fábrica de armas.

Por supuesto, un seguro garantizado y apoyo a todos los trabajadores que se encuentren en situación de paro. A los trabajadores de fábricas como las cárnicas medidas de seguridad estrictas.

Estas medidas deben de aplicarse de facto y no convertirlas en medios de tipo propagandístico por el gobierno de turno. Estas medidas solo serán aplicadas hoy si desde la calle, trabajadores, amas de casa, personas decentes, estudiantes concienciados, comienzan a unirse y a luchar por una sociedad justa desde abajo ya que desde arriba no llegará ningún cambio.

Es razonable pensar esto ya que los que están arriba viven infinitamente mejor que los de abajo y que no van a estar preocupados por invertir economías en atajar de raíz el problema o los problemas que nos vayan surgiendo a lo largo de nuestra vida.Nada más por hoy. Muchas gracias por el interés.

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